La Ciencia esa actividad superior del hombre que le ha permitido aumentar su capacidad de conciencia de la naturaleza que lo rodea y de su propia realidad social y corporal, no siempre tuvo el camino despejado para avanzar, y no nos referimos a las dificultades propias que cualquier actividad humanaencuentra en su desarrollo; sino a un fiero y prolongado asalto al pensamiento griego que representaba su génesis.
Durante más de mil años, los lideres de la nueva iglesia, con gran estrechez de mente, habian aceptado una interpretacion palabra por palabra de las Escrituras, rechzandotodo aquello que no pudiera ser reconciliado con con la Biblia. En ninguna rama del conocimientohubo el deseo tan tenaz de barrer todos los resultados del pensamiento griego con tanta determinación como lo fue en lo que respecta a la figura de la Tierra y a los movimientos de los planetas, y lo hicieron con tanta efectividad que detuvieron las manecillas del reloj desde el siglo II d. C., cuando aparecio el Almagesto de Claudio Ptolomeo, con su teoria Geocentrica, hasta el siglo XVI con la aparición de Nicolás Copérnico y su modelo heliocentrico del Mundo.
El desarrollo de la Ciencia no se detuco durante esa larga noche, pero siempre existió bajo la mirada severa y controladora de la fe. Este libro relata el azaroso camino de la Ciencia durante este periodo y las luchas y debates que libró.